Totes plegades plantem cara a l’especulació al Clot

Totes plegades plantem cara a l’especulació.

de la Vanguardia 13-12-2008…
Existe un papel que autoriza la demolición de una finca regia en el barrio del Clot, la que fue una bonita casa y hoy seguiría siéndolo, además de testigo histórico de nuestra ciudad, si no fuera porque su fachada y sus balcones se desmoronan, sus vigas se consumen por el óxido, sus paredes se derriten por las filtraciones de agua y su estructura aguanta apuntalada a pesar de las grietas.
Seguiría siendo una bonita casa si su propietario se hubiera tomado la molestia de mantenerla, cosa que por ley está obligado a hacer; pero su voluntad ha sido la de dejarla morir desde hace treinta años para hacer de esa esquina otro cubo gris de especulación. (Esto lo supongo yo, pero bueno, blanco y en botella.) Hasta ahí todo bien, o todo mal, es su casa y él sabrá lo que hace, pero hay un pequeño detalle, una piedrecita molesta que se mete en su zapato una y otra vez, y esta se llama Rosa, tiene 68 años, nació en esa casa, donde anteriormente habían vivido sus padres y abuelos, y con quien tiene un contrato de arrendamiento. ¡Ups!
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