Aquesta entrada forma part de la sèrie per difondre els debats que tindrem a la Jornada Hipotecària que fem aquest dissabte 28 de gener del 2023 a la web de nostra Associació i a la de la nostra web degana prouespeculacio.org.
Quin és el nostre objectiu amb la sèrie temàtica que acompanya la Jornada hipotecària?
Ajudar a comprendre els deutors amb un llenguatge planer, i als seus advocats, com defensar aquest dret als tribunals i posar contra les cordes aquells jutjats que s’entesten a defensar els interessos dels bancs espanyols i dels voltors establerts en paradisos fiscals en lloc de defensar el ciutadà corrent.
En els enllaços anteriors ja trobareu una poderosa bateria d’eines que hem publicat però aquesta sèrie vol aprofundir encara més per a publicitar les xerrades que fem amb els nostres advocats col·laboradors i per exposar tot allò que descobrim amb la col·laboració profitosa entre l’activisme i els lletrats que defensen els deutors.
Tant les execucions hipotecàries com els seus col·laterals, els temes de l’EURIBOR® i els fons voltor són complexos perquè es barreja enginyeria financera i el·lusió fiscal moltes vegades amb termes jurídics. Es tracta d’estudiar-ho amb deteniment. La SAREB? doncs aquesta societat, ara pública, concentra els habitatges executats de les llars portades a la ruïna per la pujada històrica de l’EURIBOR® abans de la crisi del 2007 o bé de les dacions en pagament publicitades per algunes PAH. Sense habitatges executats o lliurats per dació no hi hauria hagut mai SAREB.
Us deixem en una entrada publicada per PAH Madrid, col·laboradors de la Jornada que analitzen l’impacte de la pujada de l’Euribor i que serà tractat pel seu President, Javier CRESPO, a la JORNADA.
No, el Euribor no lo sube el Banco Central Europeo, lo suben los bancos. Y nosotros se lo pagamos.
Pese al aluvión de titulares en todo tipo de medios de comunicación del estilo de “el Banco Central Europeo sube los intereses de las hipotecas”, es necesario aclarar que el Euribor (acrónimo de Euro InterBank Offered Rate) no lo fija el BCE, sino el EMMI (siglas en inglés del Instituto Europeo de Mercados Monetarios) que no es otra cosa que una entidad privada constituida por la patronal bancaria europea. No vamos a entrar aquí en los apabullantes datos y hechos que demuestran la manipulación del Euribor desde su nacimiento hasta hoy como tipo de interés de referencia, nos remitimos a los artículos publicados en anteriores entradas sobre el trabajo de investigación llevado a cabo por los compañeros de la Asociación 500×20 que lo demuestran de forma incontestable.
Sólo como un apunte más, la avaricia de la banca no ha tenido suficiente con replicar la subida de tipos del BCE para mantener su endeble escusa, sino que ha ido mucho más allá. Cuando el BCE subió los tipos por primera vez, un 0,5 el 21 de julio de 2022, el Euribor, en una subida constante desde seis meses antes, ya había llegado al 0,99. Basta con ver en el siguiente gráfico la evolución del Euribor frente a los tipos del BCE a lo largo de 2022, para que la gran mentira quede en evidencia.
Por ello no sorprende a nadie que la banca española anuncie beneficios record para 2022, más de 20.000 millones de euros solo entre los seis bancos principales. O que los banqueros españoles sean de los mejor pagados de Europa, con 221 de ellos cobrando más de un millón de euros. Con una media de retribución anual de 2,17 millones, cuando la media europea es de 1,8.
Aún así, hemos tenido que escuchar a un portavoz de la Asociación Hipotecaria Española (los bancos) en unas declaraciones a la Cadena SER, decir que el Euribor no lo fijan los bancos, que lo fija “el mercado”. O a José Antonio Álvarez, Consejero Delegado saliente del Banco Santander, asegurar “Todos estamos en el mismo barco”. La hipocresía llevada a su más alto nivel. Lo que al Sr. Álvarez se le olvidó matizar es que, efectivamente, todos vamos en el mismo barco porque no hay otro, pero unos viajan en las cubiertas de primera y otros lo hacemos en la sala de máquinas pringándonos de grasa.
Y todo este nauseabundo cambalache tiene víctimas, las familias hipotecadas y atrapadas en esta estafa consentida por las autoridades nacionales y europeas. Además, nos encontramos con un escenario de tormenta perfecta.
Con el Euribor al 3,33 (a fecha 16 de enero) la cuota de una hipoteca media va a experimentar una subida mensual de entre 320€ y 360€. Se considera una hipoteca media con 180.000 € de capital, 25 años de duración y un diferencial Euribor +1%. Esta cifra puede variar bastante en función de cuando se contratara la hipoteca, pues esto determina la cantidad de capital pendiente de amortizar. De hecho, hay casos en los que el incremento puede ser superior. Lo que hace absolutamente inasumible para muchísimas familias continuar pagando regularmente sus cuotas.
A ello hay que sumar el incontrolado incremento de los precios del alquiler, con espectaculares subidas que convierten el acceso a una vivienda digna en un sueño imposible para cientos de miles de familias, pese a lo que dice el Art. 47 de nuestra Constitución.
Y esto en el contexto de una inflación galopante que nos quieren hacer creer que tiene su fundamento en el inicio de la guerra en Ucrania, pero que tiene sus raíces en la especulación con los precios de la energía y las materias primas por parte de los grandes multinacionales, incluidas las españolas, que aunque los medios no se los pongan, tienen nombres y apellidos. Basta echar un vistazo a los datos de incrementos astronómicos de sus márgenes de beneficio.
Ante esta situación, las medidas tomadas por el gobierno se han limitado a la aprobación de un nuevo Código de Buenas Prácticas que solo modifica superficialmente el que aprobó en 2013 el gobierno de Mariano Rajoy, sin entrar en medidas paliativas de verdad, que permitan a las familias necesitadas no verse abocadas a la pérdida de sus hogares. Estableciendo topes a las subidas del interés, haciendo las “quitas” obligatorias, no a voluntad del banco. Es decir, adaptando la deuda hipotecaria a las posibilidades de la economía familiar.
Con un proyecto de Ley de Vivienda que lleva estancado muchos meses por la negativa del partido mayoritario de la coalición de gobierno a la regulación del precio de los alquileres o la prohibición de los desahucios sin alternativa habitacional. Un proyecto de Ley que no contempla por ningún sitio los efectos de la crisis de 2008 en las familias hipotecadas entonces.
Una crisis, que pese al manto de amnesia generalizada que se ha impuesto en la sociedad oficial, ha provocado desde 2007 hasta 2022 casi 900.000 ejecuciones hipotecarias, más de 600.000 desahucios, más de 200.000 de ellos por no poder hacer frente al pago de la hipoteca. Y no es algo del pasado, en 2022 se han producido 164 desahucios al día.
Una crisis que ha resultado en que cientos de miles de familias ya han perdido su hogar o su salud, o el derecho a una vida mínimamente digna, o todas estas cosas juntas. Y en muchos casos alguno de sus miembros ha perdido hasta la vida.
Y esta sigue siendo la realidad cotidiana de otros cuantos cientos de miles de familias que, a día de hoy, se siguen enfrentando a procedimientos de ejecución hipotecaria, con su deuda vendida en muchísimos casos a bajo precio a Fondos Buitres radicados en paraísos fiscales, con el consiguiente expolio fiscal al estado español protagonizado por esos fondos y los bancos vendedores. Familias que se enfrentan diariamente a una Administración de Justicia, con el Tribunal Supremo a la cabeza, que prevarica todos los días con resoluciones contrarias a la Ley a fin de defender los intereses del sistema financiero.
Una crisis provocada por el ansia de beneficios sin límite de ese mismo sistema financiero y de un sistema político que se lo consintió, y por el que a través del negocio de la “titulización hipotecaria”, llevó al colapso del sistema económico mundial provocando la ruina de países enteros, de cientos de millones de familias de todo el mundo que vieron como sus vidas se precarizaban hasta el extremo.
Y ninguno de los responsables ha pagado por ello, es más, siguen campando a sus anchas.
https://cincodias.elpais.com/cincodias/2023/01/19/companias/1674151431_751387.html
FUENTE: Pah Madrid